Cuando se fijó observó a Babaji lavando los pies y los utensilios del anacoreta. La sonrisa de Babaji le hizo entender la lección de humildad y que no debía criticar a nadie sino ver siempre al Señor residiendo por igual en el templo del cuerpo de todos los hombres , https://bagh8-casino25813.vblogetin.com/41170583/the-2-minute-rule-for-bagh8